“Niño completo” se refiere a la idea de que los niños son mucho más que mentes jóvenes que aprenden lo académico. Tienen necesidades que van más allá del aprendizaje del lenguaje y las matemáticas. En CMS, practicamos el enfoque de “niño completo o niño integral” al cuidar de todas las necesidades humanas básicas, sensoriales, sociales, emocionales y de desarrollo de nuestros niños.
Valoramos profundamente nuestro trabajo de niño integral porque los niños merecen ser vistos como algo más que una mente que asimila información durante el día escolar. A través de este enfoque matizado, podemos comprender mejor su comportamiento en el aula y su comportamiento social para poder servirles mejor como seres humanos en crecimiento y también como aprendices. Nos esforzamos por identificar las necesidades sobresalientes de nuestros estudiantes y apoyarlos en los momentos desafiantes. ¡Sabemos que los niños aprenden mejor cuando todas sus necesidades se satisfacen lo más posible!
Apoyamos al “niño en su totalidad” creando un espacio intencional para sus experiencias en el mundo, los grandes sentimientos que pueden expresar o aferrarse y todos los demás aspectos socioemocionales de su viaje de desarrollo. Este espacio intencional se crea en cada salón de clases, así como con un salón para niños completo único, dedicado a las amplias necesidades de nuestros estudiantes. En CMS, ofrecemos contenido de aprendizaje socioemocional en cada aula durante al menos veinte minutos por día, una sala dedicada a las necesidades integrales del niño, un enfoque de crianza y compasión, así como una asociación continua con las familias que necesitan apoyarse en su comunidad para apoyo. Nuestra escuela también se ha asociado con el Centro de Defensa de los Niños de Denver para brindar servicios de terapia individual durante todo el día.
En nuestra salon de niño completo hospedamos a los animales terapéuticos, Quico y Chavo, nuestros queridos conejillos de indias. ¡Proporcionan mucha alegría y consuelo tanto a los estudiantes como al personal!
“Whole Child” refers to the idea that children are much more than young minds that learn academics. They have needs that extend beyond learning language and mathematics. At CMS, we practice the “Whole Child” approach by caring for all of our children’s developmental, social, emotional, sensory and basic human needs.
We deeply value our Whole Child work because children deserve to be seen as more than a mind that takes in information throughout a school day. Through this nuanced approach, we can better understand their classroom behavior and social behavior in order to better serve them as growing humans and also as learners. We strive to identify outstanding needs of our students and address how to support them through challenging moments. We know that children learn best when all of their needs are as fulfilled as possible!
We support the “Whole Child” by creating an intentional space for their experiences in the world, the big feelings they may express or hold onto and all of the other social emotional aspects of their developmental journey. This intentional space is created in each classroom as well as with a unique Whole Child Room, dedicated to the broad needs of our students. At CMS, we offer Social Emotional Learning content in every classroom for at least twenty minutes per day, a room dedicated to Whole Child needs, a lens of nurturing and compassion, as well as ongoing partnership with families who need to lean on their community for support. Our school has also partnered with the Denver Children’s Advocacy Center to provide individual therapy services throughout the day.